Paulo Coelho. Sus claves en La Bruja de Portobello

Textos extraídos de la Bruja de Portobello de Paulo Coelho

1. Nadie enciende una lámpara y la pone en sitio oculto, ni bajo el celemín, sino sobre el candelabro, para que los que entren vean el resplandor. Lucas 11, 33
2. ¿Cuántos de nosotros evitamos ver cómo las cosas importantes de nuestra vida desaparecen de un momento a otro?
3. ¡Ay de aquellos que buscan pastores, en vez de ansiar la libertad!
4. Nuestro tiempo en esta tierra es sagrado, y debemos celebrar cada momento.
5. Cocinamos quejándonos de la pérdida de tiempo cuando podríamos estar transformando amor en comida. Trabajamos creyendo que es una maldición divina, cuando deberíamos usar nuestras habilidades para darnos placer y para propagar la energía de la Madre.
6. Entregarse por completo al amor, ya sea divino o humano, significa renunciar a todo, incluso al propio bienestar, o a la propia capacidad de tomar decisiones. Significa amar en el sentido más profundo de la palabra.
7. Santo es aquel que dignifica su vida. Basta con entender que todo estamos aquí por una razón, y basta con comprometerse con ella. Así podemos reírnos de nuestros grandes y pequeños sufrimientos, y caminar sin miedo, conscientes de que cada paso tiene un sentido.
8. Me he dado cuenta de que la soledad es más fuerte cuando intentamos enfrentarnos a ella, pero se muestra débil cuando simplemente la ignoramos.
9. Que aunque el éxtasis es la capacidad de slair de uno mismo, el baile es una manera de subir el espacio. Descubrir nuevas dimensiones y, aún así, seguir en contacto con tu cuerpo. Con el baile, el mundo real y el mundo espiritual pueden vivir sin conflictos. Creo que los bailarines clásicos se ponen de puntillas porque al mismo tiempo están tocando la tierra y alcanzando el cielo.
10. Durante cualquier baile, al que nos entreguemos con alegría, el cerebro pierde su control, y el corazón toma las riendas del cuerpo.